El director de fe de la Casa Blanca responde a los comentarios de Trump sobre el Cielo: "Fue humildad"

Un funcionario de la Casa Blanca que trata directamente con cuestiones de fe dice que las recientes declaraciones del presidente Donald Trump sugiriendo que podría no llegar al cielo son un ejemplo de su humildad. 

Jenny Korn, directora de la Oficina de Fe de la Casa Blanca, se dirigió a la Conferencia Nacional de Liderazgo Cristiano Hispano en el Museo de la Biblia el martes. Korn, quien también sirvió en la primera administración de Trump y en la de George W. Bush, aprovechó sus palabras para avalar la figura de Trump como hombre de fe. 

"Tengo el honor de conocerlo desde hace casi 10 años", dijo. "He estado en el Despacho Oval con y sin cámaras. Y quiero que sepan que esas imágenes que ven del presidente orando en el Despacho Oval con muchos pastores a su alrededor son reales".

Korn insistió en que «tanto en cámara como fuera de ella, el presidente acepta la participación activa y la oración». Añadió: «Lo lleva en el corazón, y así es él».

"Hubo oraciones en la Oficina Oval, en la Sala Roosevelt, en la Sala Este, en la Residencia, en los jardines, en cada parte de la Casa Blanca, por dentro y por fuera", dijo.

Hablando con periodistas a bordo del Air Force One el domingo, el presidente sugirió que "tal vez no esté destinado al cielo".

"No estoy seguro de poder ir al Cielo", dijo Trump. 

Korn dijo que los comentarios de Trump no son motivo de preocupación.

"El presidente tiene su propio lenguaje, y lo miro y conozco su lenguaje, era humildad", dijo. 

En agosto, Trump hizo comentarios públicos que cuestionaban si poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania podría ayudarlo a llegar al cielo, lo que provocó un debate entre los líderes cristianos sobre el camino a la salvación. 

Korn aseguró que Trump ha aceptado a Jesucristo como su "Señor y Salvador". Si bien Trump "usa un lenguaje peculiar" y "quizás no hable como un maestro de escuela dominical", Korn enfatizó que al presidente "sin duda le gusta contratarlos".

Korn trabajó con Trump durante sus dos mandatos y en su campaña electoral de 2016. Fue subdirectora de la Oficina de Enlace Público de la Casa Blanca durante los cuatro años de su primer mandato. Durante la campaña inicial de Trump, Korn lideró las iniciativas de colaboración con diversas comunidades minoritarias y religiosas.

"Nunca entendí realmente qué era la guerra espiritual hasta que trabajé para el presidente Trump", dijo. "Entraba a la Casa Blanca y sentía una nube muy oscura sobre mí, pero había un espacio entre mi cabeza y esa nube oscura, y eran sus oraciones. Era Dios. Era Jesús".

"Pude hacer mi trabajo gracias a ustedes y a todos los millones de personas que oraron para que pudiéramos hacer nuestro trabajo durante ese primer mandato", añadió.

Ella sostiene que los asesores religiosos del círculo íntimo del presidente continuaron sus esfuerzos durante el paréntesis de cuatro años entre el primer y el segundo mandato de Trump. 

Korn dijo que fue a Mar-a-Lago con la televangelista pentecostal Paula White-Cain, pastora y consejera espiritual de Trump desde hace mucho tiempo, para presentarle la idea de establecer la Oficina de Fe de la Casa Blanca, que él estableció en febrero con ella y White-Cain a la cabeza. 

Lo abrió, lo leyó y dijo: «Me encanta». Empezó a anotar las cosas que añadiría al plan. No tuvo que llamar a un asesor ni preguntarle a nadie más. Simplemente dijo que sí.

"Esta es la primera vez que hay una Oficina de Fe de la Casa Blanca en el Ala Oeste que reporta directamente al presidente de los Estados Unidos", enfatizó.

"En la Casa Blanca, tenemos seis empleados en una oficina completamente nueva, pero también tenemos un director religioso en cada departamento y agencia, que vela por las personas religiosas en esos departamentos y en esos temas".